cuantos más años cumplo, más me detesto.
No es vender drama por nada, es mi vida normal,
el pensamiento central, que ronda mi onda cerebral.
Vine a celebrar que tengo más de un cuarto de siglo
y por mi madre que quieren que pare pero sigo.
Y seguiré el camino marcado como Garbancito,
podéis decirle a la muerte que coma.. Lo que recito.