Ella baila sola, él baila con su soledad,
en este baile de solitarios sin sobriedad.
Mientras, la ausencia le sujeta la copa
llena de recuerdos, con una mente rota.
Piensa: "¡Que fácil es vivir la vida loca!"
está al borde, a punto de echar la pota.
Quien le mandaría aterrizar en ese sitio,
donde no quedaba ni un corazón limpio.