porque sigo vivo aunque el mundo sea una mierda.
Hundido en un mar de pensamientos que se autoalimentan,
miro a mi alrededor y veo brotes libres, no macetas.
Naturaleza, una mariposa entre las flores,
mientras en Libia, un niño observa los horrores
que a ti te venderán en el telediario de la noche,
entre un anuncio de cosmética y otro de un coche.
