lunes, 18 de noviembre de 2013

Día 323

Hoy hago mi dulce introducción al caos,
una letra para esos corazones ya machaos.
Vivo a la orden de la ley innata del instinto,
te canto cuatro movimientos, sin un quinto.
No hablo latín pero levito, ya no se si vivo
sólo finjo, sigo dando vueltas en un tiovivo.
En este carrusel girando con la humanidad,
el sueño, lo dentro, lo de fuera y la realidad.