Te han echado y ni siquiera te has enterado,
tienes la cara de Rajoy leyendo las cifras del paro.
En el mismo mes, has perdido la cartera
con el DNI y se te ha roto la pantalla del portátil entera.
Te has quedado sin saldo, sin dinero y casi sin habitación,
has tenido que tirar del dinero de reserva del billete de avión.
Pero juro que nunca he sido tan feliz, ni he tenido tantas emociones,
aunque me deje la espalda, como Salva para grabar sus sesiones