sábado, 13 de julio de 2013

Día 194

No sé como te di los clavos para que clavaras mi cruz,
verguenza, que diría mi madre si rapeara tan mal como tú.
Casi 200 días escupiendo versículos para mis discípulos,
mientras tu estás vendiendo tu culo en fantásticos fascículos.
Mis colegas no venden droga, venden su puta vida,
por un curro bien pagado y un plato de buena comida.
Yo sé con quien quiero cenar todos los años en Navidad,
crees que por fin, tendré
 huevos a decir la verdad?